Corazones rotos.

domingo, 30 de enero de 2011

















Lo siento, lo siento, lo siento, lo siento...
Nunca tendrias que ser tú el que pagara las consecuencias de mis mayores errores. Pero estaré aqui. Estaré cuando quieras que esté, cuando quieras verme. Estaré donde siempre tuve que estar, en mi puesto de amiga incondicional. Estaré para que me veas reir, para darte un abrazo, para pedirte perdón. Estaré incluso para llorar contigo, porque sabes que si estás mal no voy a poder sonreir. Estaré aquí, a pesar de que no quieras verme, me esconderé, y te haré creer que te he soltado de la mano, si es lo que quieres. Estaré para picarme, para ver como me miras, preocupado, y ocultar una sonrisa y mis ganas de abrazarte cuando sé que te preocupas por mi. Estaré para ser tu apoyo, tu mano derecha, tu hombro para (no) llorar. Estaré para todo. Para lo bueno, para lo malo. Para vivir las millones de cosas que nos quedan juntos por vivir. Porque esto, solo es una pequeña piedra en el largo camino, la primera de esas mil que superaremos. Te lo prometo.

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